Integración interior, ni machismo, ni feminismo
Andrea Jaramillo H.
Ha llegado el momento en el que sentimos la necesidad de ir más allá de los roles y mandatos de ser hombre y ser mujer. Para muchos, estos se han convertido en prisiones dolorosas que oscurecieron y enviaron al olvido partes sagradas de sí mismos.
Las heridas en el femenino y el masculino vienen de una lucha perdida basada en la creencia de la supremacía de una fuerza sobre la otra. Heridas que necesitábamos para aprender a integrarnos más allá de los roles.
La integración interior sucede ahora como un camino reconciliador y sanador que nos empodera como individuos; que nos recuerda que somos perfectos y estamos completos, solo lo olvidamos por un rato; que nos invita provocadoramente a disfrutar todo el espectro de quienes somos esencialmente y que nos lleva al reencuentro como humanos desde la comprensión que somos iguales.
La integración interior se da con el uso y la experimentación consciente de ambas polaridades en una danza fluida, que en los desafíos cotidianos nos lleva a encontrar dentro de nosotros todo lo que necesitamos.
El sistema de los chakras utilizado por el antiguo yoga es un buen esquema para comprender esa dualidad femenina-masculina que debemos buscar integral dentro de cada uno. Contamos con 7 chakras principales y cada uno tiene una cualidad masculina y otra femenina a las que podemos recurrir de acuerdo a lo que sea exigido de nosotros.
Usa este mapa para atender y comprender aquella polaridad que este más dormida.
1° chakra. Polaridad femenina: prudencia. Polaridad masculina: coraje
Trabajamos con nuestros límites, identidad, asertividad, la capacidad de decir No, el reconocimiento de nuestras necesidades y la posibilidad de tomar lo que deseamos.2° chakra. PF: placer motriz. PM: placer cenestésico.
Permitimos que el amor florezca en todas sus manifestaciones y en todos los ámbitos. Jugamos el juego de la vida, sutil, delicado y precioso con suma atención, con total entrega y cuidado.3° chakra. PF: introversión. PM: extroversión.
A través de las emociones nos actualizamos en cada acto. Percibimos y honramos nuestras necesidades, deseos, posibilidades y la situación externa, incluyendo a otros, sus límites y derechos. Esto constituye una poderosa fuente de energía interior.4° chakra. PF: compasión. PM: ecuanimidad.
Hay un ‘nosotros’ que compartimos el dolor y lo padecemos juntos. Queremos actuar para aliviar el sufrimiento, aunque sea con la presencia. Entregamos generosamente una energía que se desborda sin esfuerzo desde el corazón, vertiéndose en el otro como respeto, escucha y dedicación.5° chakra. PF: inteligencia emocional. PM: inteligencia práctica.
El arte de vivir a plenitud. La experiencia espiritual se convierte en un estado mucho más simple y estable. Trabajamos en nosotros sistemáticamente y en todas las dimensiones de nuestra vida.6° chakra. PF: intuición artística-existencial. PM: intuición científica
Desde el silencio tomamos contacto con la trama holística del universo. Atendemos la intuición con responsabilidad y la desarrollamos con extremo cuidado. Develamos un mundo más rico y profundo cada día. Percibimos que todo está íntimamente interconectado.7° chakra. PF: eros. PM: logos
Encontramos la unidad o la integración de los opuestos. Corroboramos que nuestra naturaleza origina es gozosa, extática, pues somos uno con la totalidad de la vida. Comprendemos que la meta nunca existió, solo se trata de caminar, no de llegar.Fuente: El vinculo primordial, Daniel Taroppio.