Tu niño interior
Jorge Arce Hernández
Tu niño interior es la huella de ese niño o esa niña que fuiste y que ya no eres física ni cronológicamente, pero que sigue ahí, como parte tuya, resguardado en el mismo lugar de los recuerdos y del inconsciente, anclado en el cuerpo, como quedan muchas de las cosas que no ves pero que te determinan.
Ese niño interior es clave para tu sanación y tu desarrollo, para alcanzar la vida abundante, feliz y tranquila. Es él o ella el que te da el permiso para ser felices, de allí viene la energía para esto. Y sucede si está tranquilo, si es visto, si empieza a sanar sus heridas (y siempre las tiene, aunque hayan pasado por una infancia feliz).
Hoy, empieza a contactar y a generar confianza en tu niño interior y a convencerlo de lo buena que puede ser la vida. Ten en cuenta lo siguiente:
- Recuerda cómo eras en tu infancia (qué te gustaba hacer, comer, ver, cómo te vestías).
- Ten presentes escenas o fotografías de buenos momentos. También de los malos, que son los que hay que sanar.
- Ten en cuenta que lo que sea que haya pasado, ahora solo puede ser una fuente de aprendizaje.
- Puedes decirle a tu niño interior frases como las siguientes: hoy puedes confiar, te invito a la buena vida que podemos construir juntos, reconozco tus heridas y podemos empezar a sanarlas, gracias por lo que viviste para que ahora estemos aquí, y otras similares.
- Se consecuente con las frases y empieza a hacer lo que te corresponde para construir la buena vida que quieres y mereces.
- Haz algunas de las cosas que te gustaba hacer cuando fuiste niño.
- Consiente a ese niño o a esa niña interior.