Cómo liberarte de lo que te agobia

Eres responsable de lo que tanto te agobia, de lo que te incomoda, te bloquea y te hace sentir mal en tu vida. No se trata solo de la famosa ley de atracción sino de algo mucho más importante. Desde las experiencias que has tenido, desde las creencias, desde los mandatos familiares y del guión que has montado sobre cómo debe ser tu vida, te has creado como un personaje que tiene definida su manera de actuar, su mirada sobre el mundo y sobre todo lo que le pasa.

Según el personaje se construyen las escenas, es decir, según como te has definido, has definido también lo que te rodea. Si te has definido como un personaje sufrido y sacrificado, tendrás a tu alrededor escenas permanentes que te lo confirman. Si te has definido como alguien que debe luchar para cumplir las expectativas de los demás, te verá en situaciones que te lo exigen una y otra vez. Si te has definido como un personaje que cree que la plata es difícil de conseguir, así será para ti.

Por esto, eres responsable de lo que te pasa, porque lo creas a partir de lo has sido hasta ahora. Eres un actor o un actriz interpretando un personaje, que sigue un guión a través de escenas creadas a su medida. Con una aclaración: ese personaje no es realmente lo que eres, aunque así lo hayas pensado muchas veces. Lo que has sido hasta ahora es solo un resultado de muchas circunstancias e influencias que no son lo que realmente puedes ser y lo que te mereces ser.

Encárgate, entonces, de escribir un nuevo guión sobre tu vida, no para ser un personaje más sino para ser lo que realmente quieras ser. Siente que eres capaz, que eres feliz, que eres suficiente, que puedes soñar sin miedo y que puedes construir aquí y ahora la vida que quieres para ti. No le debes nada a nadie. La vida que te dieron la agradeces siendo feliz.

Asegúrate que en ese nuevo guión solo haya espacio para lo que realmente quieres,lo que deseas, lo que sueñas. Que sea un guión escrito con amor, que reconozca la luz que está dentro de ti. Tampoco tengas miedo de mirar las sombras, ese es un paso necesario.